Tenían mucha prisa en inaugurar el centro juvenil, demasiada, es normal, la anterior concejala de juventud abandonaba su puesto para dar paso a la prepotencia exhacerbada y los humos de grandeza del nuevo concejal. Demasiada prisa para revisar demasiadas cosas ... no llegaban, no les daba tiempo. Los informes técnicos los metieron en un cajón y continuaron su camino desoyendo a técnicos y trabajadores municipales ... les daba igual.
Mandaron acabar a trancas y barrancas el centro, instalar todo el materiar rápidamente, montar el mobiliario, los equipos informáticos, revisar pequeñar cuestiones de imagen y estética y adornarlo para urgentemente inaugurarlo. Parecía que el mundo se terminase.
Al final todo quedó, lamentablemente, en un centro inaugurado sin la accesibilidad adecuada para que pudiesen acceder las personas de movilidad reducida, un centro inaugurado sin las medidas de seguridad legales en un centro público, incumpliendose flagrantemente, mangas de agua contra incendios sin conectar a la red de aguas, sistemas de detección de incendios desconectados, luces de emergencia sin energía eléctrica, alarma de seguridad inexistente y para colmo un gran generador a las puertas del centro para abastecer de energía el local, ruidos, contaminación y cientos de litros de gosoil consumidos, no sólo eso sino con la consecuente protesta vecinal y las diversas reclamaciones y denuncias efectuadas por los vecinos.
Nunca pensé que la irresponsabilidad podía llegar tan lejos en el gobierno del Partido Popular, las prisas para que unos y no otros fueran los protagonistas de una inauguración podía haber tenido consecuancias lamentables para los trabajadores y usuarios del centro... Les da igual, la imagen es más importante que la seguridad.
El Partido Popular de mislata no gobierna, improvisa. No encuentro otra explicación a semejante irresponsabilidad y lamentable actuación, a no ser que ni entre ellos se aclaren, por cierto, una crisis cada día más acentuada, seguramente más pronto que tarde será popular.
Al final la presión mediática y popular les hizo cerrar las puertas del centro, días antes de su cierre por vacaciones estivales, al menos nos queda un consuelo, teníamos razón, la verdad ganó a la mentira sistemática del gobierno local, un gobierno que miente con tal de tapar sus vergüenzas.
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