Más hechos, menos palabras


Ayer murieron de hambre en el mundo 20.000 personas, hoy otras 20.000 y así todos los días. Terrible pero cierto. 800 millones de seres humamos no tienen acceso a la comida suficiente para alimentarse; 1100 millones de personas sobreviven con menos de 1 euro diario, 1200 millones de personas no tienen acceso al agua potable. Vivimos aún en un mundo profundamente injusto donde el 10% de la población mundial disfruta del 70% de las riquezas del planeta.
Creo que sobran razones para sentirnos avergonzados del despropósito en el que nos encontramos, pero también para poner de manifiesto que es posible un cambio de rumbo. Fracasado el modelo ultraliberal, que ha procurado la riqueza extrema y obscena de unos pocos y la pobreza de millones de personas, es claro que sólo con inversión social, políticas públicas y construcción constante del estado del bienestar es posible avanzar hacia una sociedad más justa, sostenible e inclusiva que erradique la desprotección social y cualquier estadio de pobreza. Y cuando hay voluntad se pueden cambiar las cosas.
Erradicar la pobreza no sólo procuraría vida y dignidad a todos los hombres y mujeres del mundo sino también su tranquilidad. Porque luchar contra la pobreza es luchar por la paz, el diálogo y la solidaridad entre los pueblos, y eso genera prosperidad equilibrada. En nuestra mano está rebelarnos con más hechos y menos palabras. Así es como España se ha convertido, en sólo cuatro años, en un referente dentro de la UE y en el mundo entero. Cuando la presente Legislatura termine seremos de los pocos países que destinen el 0,7% del PIB a la Ayuda Oficial al Desarrollo. Leire Pajín ha hecho un gran trabajo.


Si todos los países que tienen la obligación, como España, por su renta per capita, dedicaran la cuantía necesaria a la ayuda al desarrollo cumpliríamos los Objetivos marcados por la ONU. Nuestro país es ya la octava potencia económica del mundo, pero eso no nos hace mejores. Lo que creo nos hace ser mejores es que seamos de los primeros en solidaridad y en la lucha contra el hambre y la miseria. Luchar contra la pobreza implica actuar, dentro y fuera de nuestro país, contra la exclusión de los ciudadanos garantizando así sus derechos económicos y sociales. Un hecho que los socialistas sabemos bien. Nosotros, siempre hechos más que palabras.

Gracias

Sin duda alguna, una gran sorpresa. Gracias, compañeros y compañeras, amigos y amigas, por vuestro apoyo sincero, por vuestra generosidad, por vuestro respeto y aprecio. Gracias a todos los que conseguisteis sorprenderme con vuestra presencia y también a los que no pudisteis asistir. Gracias a los que confiais en mi y lo demostrais cada día. La verdad es que uno se siente bien con su gente, en su agrupación y en su pueblo. Muchas gracias.
Hace casi dos semanas los socialistas valencianos comenzamos una nueva etapa, después de más de quince años de derrotas. Los delegados y delegadas decidieron cambio para el socialismo valenciano, un cambio para recuperar la confianza y la credibilidad de los ciudadanos en nuestra política y en nuestro partido. Y también un cambio para recuperar la ilusión y las ganas de volver a ganar.

Los delegados y delegadas sabían muy bien cual era nuestro futuro, cambio para comenzar un nuevo proyecto, de izquierdas, sólido y con futuro. Y eligieron bien. Eligieron un proyecto ambicioso de cambio en la sociedad y de recuperación electoral basado en la confianza y en la credibilidad. Podemos ganar. Eso solo lo podremos conseguir, siendo valientes y saliendo a la calle, mirar a los ojos de la gente y decirles que tenemos un gran proyecto, un proyecto nuevo, con una nueva imagen, pero con la misma ideología. Somos los mismos, somos los de Pablo Iglesias, Felipe Gonzalez y en su versión moderna, los de Jose Luis Rodriguez Zapatero.

Debemos volver a trasmitir a la gente ilusión y esperanza para acabar con la derecha radical y reaccionaria.

Hoy más que nunca me siento orgulloso de pertenecer a este gran partido, me siento orgulloso porque podemos mirar a los ojos de la gente y decirles que seguiremos defendiendo la libertad, porque somos el partido de la igualdad, da igual la raza, la condición sexual, la religión, todos iguales y con derechos. Me siento orgulloso de que defendamos el bienestar de la gente, sus derechos y sus opciones a tener una vida mejor. Cada día me siento más orgulloso de pertenecer a este partido.

Sin duda, una inmensa responsabilidad es la que asumo y un gran trabajo que realizar, cambio en el socialismo valenciano, cambio para recuperar la confianza y la credibilidad de los ciudadanos, cambio para hacer más facil la vida de la gente, cambio porque nuestra comunidad se merece otra forma de gobernar, pensando en la gente.
Lo dije durante esa improvisada intervención y lo volveré a repetir para que no haya lugar a dudas "me voy a dejar la piel trabajando incansablemente para conseguir dos cosas importantes, una que jorge alarte sea el presidente de la generalitat y dos que, de una vez por todas, haya un gobierno socialista en Mislata que defienda a la gente y que deje de despilfarrar y derrochar el dinero de todos los mislateros. Acabaremos con Camps y con corredera. A eso me voy a dedicar en cuerpo y almo. En mirar a la gente a los ojos"

Nou d'Octubre



"Al Ataque" esas fueron las palabras con las que recibió el president Camps al líder del PSPV, Jorge Alarte. Curiosa palabra de recibimiento.

No se exactamente a qué ataque se refería, pero puede estar bien seguro el president que estaremos al "ataque" en todo lo que signifique más librtades y derechos para los ciudadanos de nuestra comunidad, más servicios, más bienestar, más democracia y una manera diferente de hacer política, con las personas y para las personas.

Estaremos al ataque defenciendo la educación pública y de calidad, exigiendo al consell que no haya ni un sólo niño en esta comunidad que tenga que pasar frío o calor por estar en un barracón. Estaremos al ataque defendiendo y exigiendo una sanidad pública, eficiente y de calidad, donde no haya ni un sólo ciudadano que tenga que esperar 8 meses para hacerse una prueba cardiovascular. Estaremos al ataque, presidente, para acabar con la manipulación sistemática de la televisión pública valenciana, algo sin precedentes en nuestra democracia. Estaremos al ataque para defender una televisión pública libre, autónoma, sin manipulación partidista y para los valencianos. Estaremos "al ataque" exigiendo que se aplique, de una vez por todas, la ley dedependencia, reivindicando que no haya ni una sola familia que tenga derecho a percibir la ayuda que otorga la ley y no la reciba por el despilfarro de dinero público y su dejadez. Estaremos al ataque para que todos sean iguales y tengan los mismos derechos. Estaremos al ataque exigiendo ayudas para que los más jóvenes puedan tener un proyecto de vida estable y digno en el país valenciano. Estaremos al ataque exigiendo una financiación como toca de las universidades públicas valencianas, para hacer de la educación y de la investigación el futuro de nuestra gente. Estaremos al ataque para acabar, de una vez por todas, con la corrupción y con aquellos que la amparan, la esconden y la consienten.

Estaremos al ataque defendiendo los intereses de todos los valencianos y las valencianas. Defendiendo una comunidad donde la gente se sienta bien, un país donde haya futuro para todos, una comunidad más solidaria, que apueste por lo el bienestar de los ciudadanos, que ayude a quien más lo necesita. Una comunidad donde haya ilusión y esperanza, con proyecto de pais sólido y fuerte. Estaremos al ataque defendiendo nuestra cultura, nuestra historia, pero también nuestro presente y nuestro futuro. Estaremos al ataque defendiendo y exigiendo, sin mentiras ni falsedades, lo mejor para los valencianos y las valencianas y para nuestra tierra.

Que bonita palabra president. Al Ataque